Qué curioso, la mayoría de la gente considera que su mamá es la mejor del mundo. Me refiero a las personas que tienen una relación con su mamá o con la mujer que les crió y a la que consideran su figura materna. ¿Se han dado cuenta que en el día de la madre las publicaciones en redes sociales de la mayor parte de nuestros amigos y/o conocidos se refieren a sus madres como “la mejor del mundo”, “la que tiene que mejor corazón”, “la incondicional”, “la más linda”? Y la verdad entre más lo pienso y más lo veo, todos tenemos razón, tenemos a la mejor mamá del mundo. De nuevo, me refiero a quienes han crecido con una figura materna que les inspira todos estos sentimientos. Qué increíble todo lo que despierta una madre en sus hijos, desde admiración hasta un amor profundo que no puede igualarse jamás a otro tipo de amor. He conocido a las mamás de mis amigos y la verdad debo decir que entiendo por qué todos ven en ellas virtudes, pues son mujeres maravillosas, fuertes y amorosas que aman con un sentir muy distinto al resto de los mortales. Yo evidentemente no puedo dar mi punto de vista con respecto al amor maternal, pues no tengo hijos y por lo tanto no puedo ni siquiera imaginar la transformación interna que debe provocar la maternidad en la manera de ver la vida. Pero sí puedo hablar de mi mamá, una mujer fuerte, protectora, inteligente, consejera y de buen corazón. Sus manos siempre están calientitas y sus mejillas son suaves. A mi mamá le encanta ayudar, mantenerse activa y sentirse útil para los demás. Es una mujer llena de virtudes, con un amor hacia sus hijos que a veces me cuesta comprender, y con un deseo incansable de apoyarnos a como dé lugar. La verdad debo confesar que quisiera con todo mi corazón que mami fuera eterna, no puedo ni imaginar la vida sin ella. Agradezco tanto a Dios que ella es una mujer tan sana y llena de vitalidad, y cada vez que puedo compartir con ella es lindo verla con esas ganas de moverse todo el tiempo. La verdad es que sí tengo a la mejor mamá del universo y le agradezco con todo mi ser que ella siempre, pase lo que pase, cree en mí y en todo lo que hago. Sé que soy privilegiada al tener a mi madre con vida y poder compartir tiempo a su lado. He conocido personas que me han enseñado muchísimo acerca del amor a la mamá y de quienes he aprendido a ser una mejor hija, y les estoy inmensamente agradecida por eso. Espero ser al menos la mitad de buena mujer que es mi mamá y tener ambas salud por muchos años para continuar compartiendo este viaje llamado vida.
Les dejo con esto que había escrito para mi mamá hace algunos años y sigue siendo así:
«Mamá, me has visto reír a carcajadas y me has visto llorar desconsolada. Me has apoyado aún cuando no necesariamente estabas de acuerdo con lo que decidía y me has regañado por no escuchar cuando debía. Me has escuchado en todo momento y me has aconsejado cuando no he tenido entendimiento. Me has cuidado en mis momentos de tristeza y enfermedad y me has amado hasta la felicidad. Me has visto crecer hasta convertirme en una mujer y me has visto dudar en este camino que no me deja de sorprender. Me has visto triunfar en lo que siempre soñé y me has visto fallar cuando lo intenté. Me has besado con ternura y me has abrazado con locura. Me viste volar del nido aunque no era lo que tu corazón quería y tomar mis propias decisiones con valentía. Has estado desde siempre a mi lado y prometo amarte y valorarte, pues sos mi madre y nunca me has abandonado. Gracias, mamá. Te amo.❤️»
Espero que puedan disfrutar del tiempo con su mamá, no solo en el día de la madre, si no cada segundo que tengan la oportunidad de estar con ella. Y para quienes ya no cuentan con ella en este plano físico, deseo que los recuerdos que tengan sean lindos y reconfortantes en momentos difíciles.
¡Feliz día de la madre! Y feliz día a la mejor mamá del mundo, la mía.
– Sofi♥
English 
Spanish